Caracoles en Salsa de Almendras


Aún no es tiempo de caracoles, queda muchísimo para que llegue la primavera (de hecho el frío está aún por llegar), pero si tenemos un antojo podemos recurrir a unos buenos caracoles congelados y con ellos preparar esta exquisita receta: caracoles en salsa de almendras.

 Los caracoles y las cabrillas se preparan de muchas maneras; aquí en Andalucía son muy típicos comerlos en caldo en cualquier terraza cuando empieza a hacer calor con una cervecita bien fresquita. Pero también están muy ricos en salsa de tomate, o en esta riquísima salsa de almendras con la que terminaréis mojando pan.
 Esta deliciosa salsa de almendras se prepara a partir de un sofrito y su gracia radica en la mezcla de especias y hierbas que aliña el conjunto. Las almendras aportan textura y un sabor inigualable. Tenéis que probarlos.
Disanfrío nos sirve sus caracoles bien limpios y preparados para que nosotros solo nos ocupemos de preparar una rica salsa para acompañarlos. Y es que nosotras mantenemos nuestra confianza a nuestro proveedor de congelados porque nunca nos defrauda, todo de su amplio catálogo es de primerísima calidad y eso se nota en su sabor y textura.


Ingredientes:
500 gr de caracoles congelados
Media cebolla
Un tomate maduro
Tres dientes de ajo
Una rama de hierbabuena
Una rama de perejil
Una hoja de laurel
Medio vaso de vino blanco
Una cucharada pequeña de comino molido
Unos granos de pimienta negra
Una cucharada pequeña de pimentón dulce
Cuatro guindillas secas
Un puñado de almendras
Una rebanada de pan
50 gr de jamón serrano
Cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Sal

Elaboración:
Descongelamos los caracoles a temperatura ambiente y después los enjuagamos varias veces en agua fría.
En una cazuela freímos la rebanada de pan, los ajos pelados y las almendras. Retiramos y reservamos en el vaso del mortero pues luego estos ingredientes formarán parte del majado que agregaremos al guiso.
En la misma cazuela y en el aceite restante pochamos la cebolla que habremos picado muy finamente. Cuando la cebolla empiece a estar transparente añadimos el tomate rallado y el perejil picado fino y terminamos de sofreír.
Fuera del fuego agregamos las especias, el jamón serrano y la hoja de laurel.
Majamos los ajos, la rebanada de pan y las almendras fritas que teníamos reservadas en el mortero. Añadimos al majado el vino blanco y lo vertemos en la cazuela que devolvemos al fuego. Añadimos dos vasos de agua y esperamos a que evapore el alcohol del vino. En este punto incorporamos los caracoles, la rama de hierbabuena, las guindillas secas y rectificamos de sal.
Cocinamos los caracoles en la salsa unos veinte minutos, añadiendo sal si es necesario. Servir bien caliente.

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